La documentación existente de plantas medicinales mesoamericanas se produjo bajo supervisión colonial y siguió modelos europeos que a menudo distorsionaban los conocimientos médicos nahuas. Esta página del Códice de la Cruz-Badiano, por ejemplo, describe el tratamiento nahua para una enfermedad categorizada como abdereticam mentem, o mente de Abdera. Este término se refería a una ciudad europea cuyos residentes tenían la reputación de ser locos o estúpidos, y probablemente se utilizaba en las fuentes clásicas leídas por los autores del códice para describir la locura. Sin embargo, el término en latín no capta las complejidades de la enfermedad nahua que se buscaba registrar. Para ese entonces, la medicina nahua había logrado una comprensión sofisticada de la salud mental y espiritual manifestada en el cuidado integral de las relaciones familiares y comunitarias, en el comportamiento sexual mesurado, en la disciplina religiosa y en los tratamientos medicinales para enfermedades mentales.
El tratamiento prescrito en esta página recomienda, entre otras cosas, beber los jugos de las plantas representadas (cacahuaxochitl y yolloxochitl) para “expulsar radicalmente del pecho el mal humor”. Ambas plantas están directamente relacionadas con el tonalli, una de las tres entidades que los nahuas creían que animaban a los individuos. Tonalli es una fuerza mediadora entre el cuerpo humano y el cosmos. Está ubicada en la cabeza y energiza todo el cuerpo, proporciona fuerza y valor e influye en el buen razonamiento y la autoconciencia. Cuando se perturba el tonalli, afecta al sueño y cataliza un estado de miedo intensificado y, en casos graves, puede provocar una enfermedad aguda o incluso la muerte. Teniendo en cuenta su asociación con el tonalli, la enfermedad discutida aquí probablemente fue una especie de estupor mental que escapa a la terminología latina.
La planta representada a derecha, el yolloxochitl o flor del corazón, es un tipo de magnolia en peligro de extinción que era común en los jardines mesoamericanos debido a su hermosa apariencia, dulce aroma y propiedades curativas. Actualmente, los curanderos nahuas la usan para tratar dolencias nerviosas y cardíacas. Sus propiedades curativas han sido confirmadas por la farmacología moderna, que ha encontrado en la flor componentes favorecedores para la salud cardiovascular. Su nombre en náhuatl, que usa el prefijo de corazón (yóllotl), hace referencia tanto a la forma de la flor como a sus propiedades curativas.
Imagen
- Martín de la Cruz. Libellus de medicinalibus indorum herbis [Cruz-Badiano Codex]. Translated by Juan Badiano. 1552. Fol. 53r. Courtesy of the Instituto Nacional de Antropología e Historia, México (CC-BY-NC-ND).
Véase también
- Bucay, José Waizel. “Uso tradicional e investigación científica de Talauma mexicana (D.C.) Don., o flor del corazón.” Revista Mexicana de Cardiología 13, no. 1 (2002): 31–38.
- Ortiz de Montellano, Bernardo R. Medicina, salud y nutrición aztecas. Madrid: Siglo XXI, 1993.
- Viesca Triviño, Carlos. “El Códice de la Cruz-Badiano, primer ejemplo de la medicina mestiza.” In El Mestizaje cultural y la medicina novohispana del siglo XVI, edited by Juan Comas et al., 91–128. Valencia: Universitat De València, Instituto De Estudios Documentales e Históricos Sobre La Ciencia, 1995.