Antes de la invasión española, los mesoamericanos habían desarrollado un conocimiento sofisticado de la salud y la medicina. Para ellos, la salud comprendía todas las facetas de la vida: eso es, no solo lo físico, sino también lo espiritual, mental y emocional. La buena salud implicaba moderación en la dieta y el comportamiento, y se pensaba que los excesos emocionales y sexuales volvían a las personas más vulnerables a las enfermedades. La higiene y la limpieza se consideraban de suma importancia, y eran fundamentales para el bienestar físico y moral. Había decenas de especializaciones médicas, entre ellas: obstetras, traumatólogos, oftalmólogos, boticarios, dentistas y curanderos espirituales. Tanto los hombres como las mujeres practicaban la medicina y la formación médica se transmitía principalmente de una generación a otra. Los nahuas desarrollaron anestésicos, procedimientos quirúrgicos refinados y remedios muy efectivos a base de plantas.
Imágenes
- Florence, Biblioteca Medicea Laurenziana, MS Mediceo Palatino 220 (Florentine Codex), book 11, fols. 92v–93r (3:244v–245r). Courtesy of the Biblioteca Medicea Laurenziana.
Véase también
- Ortiz de Montellano, Bernardo R. Medicina, salud y nutrición aztecas. Madrid: Siglo XXI, 1993.